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MISTICISMO





El término misticismo indica un tipo particular de experiencia religiosa, muy caracterizada por la confianza en la posibilidad de un retorno a Dios a través de la ascesis: es decir, una práctica meditativa que <permite al alma liberarse de todo lo que es corpóreo>, alcanzando así la condición de divinización del sujeto que es el éxtasis (-->).

Este proceso ascético se realiza a través de vías que están más allá de la razón: todas las variantes del misticismo, tanto de Oriente como de Occidente, indican en el conocimiento ordinario y racional del mundo (el samsara en la terminología hindú) un <estado de turbación mental que debe ser superado>. La razón es una ilusión, un falso saber que se ha de combatir mediante el vaciamiento de la mente; para llevar a cabo esta <limpieza> de la psique, cada tradición propone técnicas de meditación (-->) específicas, verdaderas formas de profilaxis mental.

De todas formas, la renuncia a la racionalidad es una condición necesaria pero no suficiente para llevar a cabo el acontecimiento extático: la mente, además de ser liberada del exceso de informaciones que la sofoca, es curada del hábito de la abstracción y de la tendencia innata a discriminar, dividir, comparar, medir y ordenar en categorías. En particular <es necesario superar el proceso mental de individuación> mediante el que identificamos cada ente diferenciándolo del resto: es un esquema mental útil en la vida cotidiana, pero falso, ya que esconde la esencia de la realidad. 

Debe ser superada incluso la sensibilidad. Aquello que debe ser abolido es, justamente, el modo normal de vivir: es decir, la conciencia de uno mismo como entidad individual y separada del ambiente en que se está inmerso, el percibir el mundo como un conjunto de elementos distintos entre sí. La enseñanza final de todo misticismo (no una verdad racionalmente afirmada, sino una condición que debe alcanzarse con la experiencia) es la unidad fundamental del Universo. Según Dionisio, el fundador de la teología negativa (-->), <es necesario abandonar los sentidos y las operaciones intelectuales, todas las cosas sensibles e inteligibles, todas las cosas que son y aquellas que no son. A partir de una total ignorancia, propender cuanto sea posible hacia la unión con Aquél que supera cualquier ser y conocimiento>.

El misticismo, cuya manifestación más arcaica fue el chamanismo (-->), es una dimensión presente en modalidades diversas en todas las grandes religiones y ha sido muy elaborado sobre todo en la tradición oriental. Hasta el nacimiento de la Cábala (-->), en el s. XIII, no estuvo presente en el hebraísmo; por lo que se refiere al pensamiento filosófico occidental, apareció por primera vez en la doctrina de Plotino (s. II d.C.).

El misticismo cristiano, fenómeno marginal en la Iglesia Primitiva (-->), nació en la Alta Edad Media con la teología negativa (-->) de Dionisio el Areopagita y después se afirmó en el ámbito del movimiento franciscano. A pesar de que Pablo afirme en la Segunda Carta a los Corintios haberse elevado místicamente hasta el Tercer Cielo, el misticismo, mediante su actitud antagonista frente a los valores de la racionalidad, ocupó siempre un lugar subordinado en el Occidente cristiano.




TOMADO DE ATLAS UNIVERSAL DE FILOSOFÍA - OCEANO